Desde el PSOE en el Cabildo de Gran Canaria pedimos al Presidente del Cabildo de Gran Canaria, Bravo de Laguna, que defienda los intereses de los usuarios de transporte público de Gran Canaria, y que inste al Estado, a Mariano Rajoy, a que mantenga la partida establecida en los PGE 2013.
El Proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2013, presentados por el Consejo de Ministros el pasado viernes, nos trae una sorpresa más para el transporte regular de viajeros de Canarias. En dichos Presupuestos se suprime la partida para la financiación de la renovación de la flota de las operadoras de transporte público de pasajeros por carretera, que era un montante de cinco millones, para reducirlo a cero. Las operadoras de Gran Canaria pierden, en total, una aportación de unos 2 millones de euros en este concepto.
En el mandato anterior, con el Contrato Programa 2009-2012 se garantizaron 8 millones para Gran Canaria para la renovación de la flota. Dos millones por año, que se detraían de los 5 millones anuales para Canarias (2 para cada isla capitalina y uno a repartir entre las islas periféricas). El montante total del Contrato Programa de transporte de viajeros por carretera para Canarias era de 120 millones de aportación del Estado, 30 por año, de los que 25 anuales son para gasto general (kilometraje concesionarias y Eje Transinsular fundamentalmente) y 5 millones anuales son para la renovación de la obsoleta flota de guaguas.
Es decir, si se confirma no sólo el recorte de este año, sino el incumplimiento en el cuatrienio 2.013-2.016, Canarias perderá 20 millones de euros en inversiones en renovación de flota del transporte público.
La pérdida de estos recursos, a parte de un grave incumplimiento con Canarias por parte del gobierno de Rajoy, supone que en cuatro años volveríamos a la situación de envejecimiento de nuestra flota de transporte. En el mandato anterior bajamos la media de edad de los vehículos de 10 a 7 años. Si la flota envejece los efectos serán medioambientales al mantener vehículos más contaminantes en uso durante más tiempo pero, además, tendrá un resultado negativo en la cuenta de resultados de las empresas concesionarias, como Guaguas Municipales y Global, que aumentarán sus costes de mantenimiento, lo que podría suponer que se tengan que derivar, en el futuro, dichos costes al billete del pasaje.
Las consecuencias las acabarán pagando los usuarios del transporte público de pasajeros, que se corresponden con las familias más necesitadas, al ser un cliente cautivo de dicho transporte, que no se puede permitir otras alternativas de movilidad.
Hay que recordar que el Cabildo, a través de la Autoridad Única del Transporte, debe compensar los costes de la empresa concesionaria del servicio público que no sean cubiertos por la tarifa del billetaje o por la subvención de los kilómetros que plantea el propio Contrato-Programa, por lo que o les paga la diferencia por el desfase que pueda producir este recorte el Cabildo, o lo derivan al coste del billete y lo pagan los ciudadanos.