Hace unas semanas, el Presidente del Cabildo de Gran Canaria anunció que iba a triplicar la tasa de basura con respecto a la que está en vigor, cargando sobre las espadas de la ciudadanía el peso del coste de la conversión de los vertederos de Juan Grande y Salto del Negro en complejos medioambientales.
Ya, desde el Grupo Socialista en el Cabildo, dejamos claro que las declaraciones del Presidente lo único que conseguían era generar confusión e indignación. Hay que recordar que en el Pleno del pasado mes de junio se aprobó una Moción, a iniciativa del PSOE, para constituir una Comisión de seguimiento del sellado de los vertederos, la construcción de los nuevos vasos de vertido y la puesta en marcha de los complejos medioambientales. En dicha comisión debían estar representados los vecinos y los ayuntamientos de la isla, en la medida que la puesta en práctica de los complejos medioambientales supondrán la imposición de unas tasas acorde al criterio europeo de “quien contamina paga”. Esto, a día de hoy no se ha cumplido.
Además, advertimos que los parámetros con los que se movía el Presidente insular gravaban, más si cabe, la situación de las familias grancanarias con un gasto a sumar a la desastrosa situación de las economías domésticas provocadas por la crisis y, en concreto, con la subida de numerosos impuestos, tasas y precios públicos y privados. Por lo que apostábamos por que la subida fuera progresiva, asumiendo el propio Cabildo el peso principal del coste de la misma, dada la buena situación económica en que dejamos las arcas de esta Corporación tras el mandato anterior.
Sin embargo, el Gobierno insular, lejos de establecer los consensos pertinentes y exigidos por todos, ha presentado un proyecto de Ordenanza fiscal con las nuevas tasas, en la que incluye subidas en torno al 60%, y que tiene carácter provisional hasta que los proyectos de ejecución de las obras de los dos complejos sean culminados y que, según palabras del propios Presidente Bravo de Laguna, pueden suponer subidas en torno al triple de las tasas actuales de tratamiento de residuos.
En este sentido, los socialistas hemos presentado en el día de hoy una enmienda que plantea la creación de una subvención a los sujetos obligados al pago de estas tasas de hasta el 90% de la subida, que será asumida por el propio Cabildo por recursos propios y que irá decreciendo los próximos años hasta su desaparición.
Esto garantizaría la implantación progresiva de las tasas y daría tiempo a la Administración a reducir futuros costes gracias a la reducción de emisión de residuos en origen y a la venta por generación eléctrica de los tinglados de valorización energética que se ubicará en ambos complejos medioambientales, tal y como plantea Europa.
El viceportavoz socialista en el Cabildo, Augusto Hidalgo, ha recordado hoy mediante un comunicado a los medios de comunicación que “ha sido el retraso de la Administración la que provoca esta subida sorpresiva y radical de tasas para que la soporten los bolsillos de la ciudadanía. Una década de incumplimientos en la gestión de residuos, a la que puso fin el gobierno insular anterior, no puede recaer sobre las capas más débiles de la población, que no son causantes del retraso en el cumplimiento de la ley por parte de sus gobernantes. Por tanto, es nuestra obligación asumir medidas paliativas que ponderen los costes, el reparto equitativo de los recursos y el sostenimiento medioambiental de la Isla, con una materia tan delicada y vital como es la gestión de nuestros residuos”.