El pasado día 24 de febrero despertamos con las tropas rusas invadiendo Ucrania; una noticia que asolaba a la población de ese país, golpeaba a la ciudadanía europea en sus valores y encogía los corazones de todo el mundo al sentir el horror de una guerra y al ver a cientos de miles de ucranianos huyendo de ella.
La respuesta europea fue inmediata, desde la unidad y la firmeza, ante un Putin desafiante a todo, incluso a la legalidad internacional, a la paz y, sobre todo, a la vida.
La Unión Europea ha desplegado una acción sin precedentes, poniendo en marcha todas las vías diplomáticas, sanciones económicas y activando la directiva europea de protección para acoger y garantizar la asistencia y los derechos a las personas que huyen de la guerra.
Todos los gobiernos europeos han reaccionado, de manera conjunta y coordinada, poniendo lo mejor de cada uno de ellos.
El Gobierno de España, articulando un conjunto de medidas en diferentes ámbitos, apoyando e impulsando el Fondo Europeo para la Paz, enviando toneladas de material humanitario y estableciendo un Plan Nacional de Respuesta al Impacto de la Guerra.
Las comunidades y ciudades autónomas, colaborando y ofreciendo recursos; los grupos parlamentarios, mostrando la unidad en la acción de país; los medios de comunicación, relatando a la opinión pública lo que está sucediendo allí y la sociedad de nuestro país, compartiendo el dolor y apoyo al pueblo de Ucrania.
Ante una acción tan vil y despiadada como esta guerra perpetrada por quien desprecia la vida, mostramos nuestra unidad en la actuación conjunta y coordinada de la Unión Europa, nuestra firmeza en la defensa de la democracia, en los valores que representamos y nuestra solidaridad al pueblo ucraniano.
Son tiempos de dificultad y necesariamente de unidad. Quienes conformamos el Sistema Nacional de Salud sabemos de la importancia de salvar vidas.
Por eso, hemos puesto a disposición de Ucrania más de 5.000 camas hospitalarias, material sanitario, ventiladores y medicamentos, con la acción coordinada de la Comisión Europea, a través de la Autoridad para la Respuesta Sanitaria de Emergencia (HERA), el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) y la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria de la Comisión Europea (D G SANTE).
Parar la guerra es el objetivo compartido por todos, desde la unidad, la firmeza y la solidaridad con quienes están sufriendo.