Los ministros y ministras de salud de la Unión Europea, junto a la Comisaria Kyriakides, OMS Europa, el ECDC y la EMA, nos hemos reunido esta semana para abordar la situación en Ucrania y continuar organizando la ayuda sanitaria a la población en esta ilegal e injustificada guerra que está teniendo, como consecuencia, una crisis social y humanitaria que nos recuerda lo peor de nuestra historia.
Ha participado el ministro de Salud de Ucrania, Viktor Lyashko, y su testimonio ha sido devastador. Hospitales bombardeados, millones de personas desplazadas y miles de personas fallecidas. Un relato durísimo hecho desde la firmeza y la fortaleza que está mostrando el pueblo ucraniano y los sanitarios de ese país, que siguen allí prestando asistencia en condiciones muy complejas.
La respuesta europea en este tiempo de máxima dificultad es de máxima unidad.
Todos los ministros y ministras hemos mostrado nuestro apoyo a Ucrania. España, también, con la solidaridad y el compromiso del Gobierno de España, las Comunidades y Ciudades Autónomas, todas las instituciones y la ciudadanía de nuestro país.
Así, hemos enviado desde el primer momento más de 20 toneladas de ayuda humanitaria, con productos sanitarios y medicamentos. Desde el Sistema Nacional de Salud, hemos puesto a disposición más de 5.500 camas, de las que 1.184 son pediátricas.
Se ha establecido un mecanismo, coordinado con la Unión Europea, para ofrecer y enviar los medicamentos que se van precisando a Ucrania y a los países limítrofes, que son el primer contacto con las personas que huyen de la guerra.
Estamos organizando y recibiendo la llegada de aquellas personas que vienen a nuestro país como destino. En España contarán con la atención que precisen, tal como estableció la Unión Europea en la Directiva de protección temporal el pasado 4 de marzo. Y, para eso, van a contar con los recursos que los distintos Ministerios del Gobierno de España están poniendo a disposición.
Nos corresponde dar una respuesta coordinada en materia sanitaria, una asistencia común, que incluya las actuaciones a realizar, según la clínica de las personas que lleguen, con la adaptación al calendario vacunal, empezando por la COVID-19, pero que incluya también otras vacunas, acorde con nuestro calendario acelerado de vacunas.
En este sentido, la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial, está trabajando un protocolo común de atención sanitaria para los refugiados procedentes de Ucrania en todo el territorio nacional, de acuerdo con el ECDC.
La crisis del coronavirus nos ha demostrado que, cuando trabajamos coordinados, multiplicamos los resultados. Así debe ser también en este momento, en el que nos enfrentamos a una crisis humanitaria con los sistemas sanitarios afectados por la pandemia. Debemos seguir reforzándolos.
La guerra de Ucrania, a las puertas de la Unión Europea, nos recuerda una vez más que, ante una circunstancia devastadora, nuestro viejo continente se hace más presente y necesario que nunca, para poner fin a esta guerra, porque, como diría el filósofo y sociólogo Edgar Morin, desde la común humanidad, Europa está destinada a salvaguardar la vida en nuestra tierra-patria.